“Hemos tenido diferencias en esta negociación, no estuvo fácil llegar a acuerdos. Sin embargo, todos pusimos el interés de Chile por delante y se cedió respecto a las pretensiones iniciales, y hoy logramos subir el sueldo mínimo a más de los 500 mil pesos”.
Esas palabras fueron parte del discurso del presidente Gabriel Boric en el acto del día del Trabajador, el que se llevó a cabo ayer, donde, además, reconoció los avances que se han logrado en materia laboral bajo su administración.
En ese sentido, destacó la Ley Karin, la reducción de la jornada laboral, la conciliación de la vida familiar, la reforma de pensiones y el aumento del sueldo mínimo a 500 mil pesos.
Asimismo, el mandatario señaló que la agenda del Ejecutivo tiene un sentido profundo y no es solamente para hacer un “check”.
Pese a ello, lo cierto es que hay problemas estructurales que afectan al mundo laboral en Chile que no se han podido solucionar. Entre ellos, se encuentran una tasa de desempleo cada vez más cercana a los dos dígitos, una informalidad alta, las brechas de género y los problemas de los jóvenes para formar parte de la población ocupada.
Frente a ese escenario, la presidenta de la Confederación de la Producción y del Comercio, Susana Jiménez, recalcó la necesidad de más políticas públicas enfocadas en la formalización del empleo.
Esas declaraciones se enmarcan un día después del acuerdo alcanzado entre el gobierno y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para elevar el sueldo mínimo a los 529 mil pesos desde este mes y que llegará a los $539 mil en enero del próximo año.
Dicho ajuste real del 3,6% es mucho menos que lo que la CUT quería en un inicio, una buscaban llegar al millón de pesos en 2030, y que fue tildado de escandaloso, populista y egoísta.
De esta manera, reconociendo que la realidad del Chile actual los hizo entender que al menos ahora esa cifra es inalcanzable, el presidente de la multisindical, David Acuña, delegó la responsabilidad al Congreso.
En tanto, pese a que hay un sentido compartido de la preocupación del contexto económico actual, sin dudas, la iniciativa no convence en lo más mínimo a la oposición.
De hecho, el diputado Felipe Donoso (UDI), quien integra la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, es uno de los que han sostenido que son irresponsables y poco realistas.